Caras preocupadas, ministros distraídos, la mayoría se iban sin firmar.
Es que no es para nada fácil lo que viene.
Años de clientelismo, populismo, demagogia.
Estos son los resultados:
HAMBRE.
RECESIÓN.
POBREZA.
¿Esperanza?, no hay nada que festejar, no se arregla solo trabajando, solo con "gestión".
No hay plata, hay déficit, hay deuda.
Ya no queda tiempo para improvisar.
Es hora de madurar.