19 enero 2020

Sucedió ayer en Buenos Aires.

"Ayer, mientras esperaba a mi pareja en la puerta de una galería a metros de av.Corrientes, pasadas apenas las 14hs, escucho de repente
 gritos de mujer, y veo a la gente , algunos sin dejar de caminar y otros deteniéndose, que miraban hacia un mismo sentido.
A los minutos, pasa una chica corriendo, no tendría más de 25 años, junto a un muchacho.
Gritándose mutuamente.
El tenia un poco de sangre en la cara.
Parecía seca.
Inmediatamente, dos parejas de policías lo cercaron y lo apartaron.
La pareja masculina hablaba con el , la femenina con ella.
Dió la casualidad, que a la chica la trajeron a no más de 2 mts de mí, así que sin quererlo, fui testigo de su historia.
Ella tenía 30 años,como dije no los aparentaba, muy bonita, pelo ondulado largo, y muy alterada por la situación.
Hacía solo un mes que salían, pero la relación digamos.... no congeniaba,ella aseguraba que era buen muchacho, pero a veces explotaban asi.
Estaba muy exaltada, y me dio pena claro,  me sentí reflejado, cuantas veces me habrá pasado lo mismo.
No congeniar, no entenderse, no encontrar  unión en la relación.
Cuando tenía su edad, era mucho más efusivo en mis pensamientos, muchas veces quise cambiar a la mujer que estaba conmigo a mis gustos, mi filosofía, mis creencias.
Por lo general cuando uno es joven lo hace.
Perdí muchas buenas mujeres, por supuesto.
Cuando vino mi mujer (aclaro, a ella le gusta que la llame así), pasamos junto a los policías y el muchacho.
Tenía cara triste, me pareció un buen pibe, estaba sorprendido, lo único que escuche decirle a los policías fue:
"-Siempre se pone así, siempre se pone asi"-.
Y pensé, "que lastima que no pueden encontrarse, hacen una linda pareja", y seguimos nuestro camino."

Dario Sintra.